sábado, 1 de octubre de 2011

CÁMARA DE FOTOS RECUPERADA

Llevo ya un tiempo, como has podido ver, en que no hacía ninguna entrada en el blog. La causa: mi cámara de fotos estaba en la maleta "abandonada",por un pequeño accidente, en la República Checa.
Una vez recuperada, te iré contando poco a poco, mi viaje de este mes de septiembre.
Junto con algunas amigas españolas, nos hemos sumado al magnífico viaje que el Forum Alte Spitze (FAS) ha organizado por Alemania, Hungría, Austria y Eslovaquia. Hemos visitado distintos museos y asociaciones de encajeras, que han puesto a nuestra disposición fondos de encajes y bordados que no se encuentran a la vista de los visitantes como tú y yo cuando vamos por "libre". Gracias, mil gracias al FAS.

Iniciamos el viaje dos días antes del itinerario marcado para ir a la ciudad alemana de Bielefeld, que se encuentra a unos 100 Km de Hannover y a 300 de Frankfurt. Es una de las veinte ciudades más importantes de Alemania, y su desarrollo industrial se basó en el lino. En el parque se encuentra la estatua al tejedor de lino que conmemora la importancia de esta industria para la ciudad.

Pero el objetivo no era ver la ciudad, sino su impresionante museo de abanicos, el Deutsches Feacher Museum, propiedad de la familia Barisch.
Como ves, por la puerta de entrada, pasaría completamente desapercibido y contrasta con las joyas de su interior.

Se realizan exposiciones periódicas en las que saca a la luz algunos de sus más de 3000 abanicos. En la actualidad y hasta el 2012 la exposición es de "Abanicos y Abaniqueras".
El propietario Gúrter Barisch hizo de guía y nos hizo disfrutar durante dos horas (que supieron a poco) explicándonos las características de los abanicos, su procedencia y toda una serie de anécdotas y curiosidades. Como ejemplo la figura de porcelana, que compró simplemente porque la dama lleva un abanico en la mano, pero que cuando llegó a casa descubrió que se trataba de un perfumero. También el pais enmarcado. Era algo normal que los varillajes se rompieran (era el arma de las damas frente a los "moscones") y como los países eran joyas, la mayoría pintados por importantes pintores de la época, se enmarcaban e incluso el propio pintor completaba el paisaje haciendo un cuadro completo.


Abanicos con varillajes de marfil, carey o ricas maderas talladas y embellecidos con coral, piedras preciosas... y algunos con encajes, como este con encaje duquesa de bruselas.


No pudimos resistir la tentación de adquirir el libro publicado por los señores Barisch en el que se recoge una parte de su fabulosa colección. Si estás interesada, seguro que te lo manda. El único problema es que está en alemán, pero como "una imágen vale más que mil palabras" es muy, muy recomendable.

Barisch Stiftung
Am Bach 19
33602 Bielefeld
Phone: 0521 / 6 41 86
Fax: 0521 / 6 41 87



También ha encontrado brujuleando una página que te introduce en distintos abanicos según las épocas, un glosario, la historia, libros y enlaces a otras páginas también muy interesantes.

1 comentario:

  1. Pilar, ya te echaba de menos, ¡qué maravilla de abanicos! Espero que ahora te animes y hagas uno.
    bsos

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